lunes, 9 de enero de 2012

BLOQUE 2 - Cuento adaptado

TODA CLASE DE PIELES

Hace muchos muchos años, en un reino pequeño, había un castillo donde gobernaba un buen rey. Éste castillo era pequeño, al igual que sus tierras, pero a él le daba igual, porque como todo hombre de aquella época, estaba casado con una mujer, pero no una mujer cualquiera sino con la más bella que él jamás había visto.
Su esposa era igual o más buena que el rey, lo que la convertía a la vista de los demás casi en una diosa, porque no sólo era amable con los que la rodeaban, sino que vestía bien, olía bien, era guapa, era... perfecta.
Pero a pesar de ello, la vida de los reyes no era perfecta, porque a su pesar, no conseguían tener hijos, y era su mayor deseo, ellos darían cualquier cosa para tener un pequeño bebé en sus vidas. Aunque no lo conseguían, ellos no cesaron el intento, y al final, un día sin quererlo supieron que la reina estaba embarazada de una niña; esto puso muy felices a los reyes, que fueron felicitados por todo el reino y sus ciudadanos, porque iban a tener una futura reina.
Cuando llegó el día del parto, todo el mundo estaba muy nervioso, pero el rey estaba al borde de un ataque de nervios. Se paseó y se paseó por los pasillos del castillo. Y de repente oyó el llanto de un bebé, salió corriendo a verlo cuando se cruzó con un médico en la puerta de la habitación. El médico muy dolido le dijo que había tenido una preciosa niña, pero que había una mala noticia, que en el momento habían tenido problemas y su mujer había fallecido. El rey rompió a llorar y cogió a su hija en brazos jurándose a sí mismo hacer feliz a aquella niña como lo hubiera hecho la reina. La miró a los ojos y supo que debía ponerle el mismo nombre que el de su madre: Flor.
Pasaron los años y Flor era feliz junto a su padre, aunque su padre nunca le dejaba salir más allá de los muros que rodeaban los jardines del castillo.
Siguieron pasando los años y Flor seguía siendo feliz, pero notaba que le faltaba algo que la hiciera sentirse completamente llena. El rey cada vez la compraba más regalos y la intentaba animar más, pero Flor poco a poco iba apagándose, se estaba marchitando. Todas las tardes se sentaba en la ventana de su habitación para ver cómo caía el sol y se hacía de noche; entonces un día llegó a la conclusión de que tenía que salir de allí, de que se quería acercar más al Sol porque cuando lo miraba se sentía cálida, se sentía a gusto, y el sitio más cercano al Sol era se juntaba con el horizonte, la unión entre Sol y tierra.
Durante varios días el rey notaba más feliz a Flor, pero no entendía por qué de ese cambio, y le preguntó a su hija, a lo que ella le contestó:
- Ya sé lo que quiero para ser feliz.
- ¿Y qué quieres hija mía?- preguntó él.
Ella pensó que para marcharse de allí tenía que quitarse la atención de su padre, y así poder huir, por lo que decidió engañarle.
- He decidido buscar un príncipe que me despose. Pero para encontrarlo tendremos que dar un baile de tres días en el que yo estaré guapa si me regaláis tres vestidos, uno tan dorado como el Sol, otro tan plateado como la luna y otro tan brillante como las estrellas- dijo ella.
El rey no estaba muy convencido, pero como era lo que su hija necesitaba para ser feliz, cedió. Y mandó confeccionar los tres vestidos.
A los pocos días llegaron los tres vestidos, perfectos, uno tan dorado como el Sol, otro tan plateado como la luna y otro tan brillante como las estrellas. Flor se quedó paralizada, y ante las repetidas preguntas de su padre sobre los bailes, ella decidió dejar a su padre que lo planeara él.
Pero Flor le pidió otro regalo más, un abrigo de toda la clase de pieles de animales de su reino. El padre lo mandó confeccionar al igual que los otros vestidos, y el abrigo llegó a los días siguientes.
Pero no faltaba mucho para el baile, y el rey cada vez estaba más ocupado con los preparativos, así que Flor en un momento de despiste de su padre se escapó con los tres vestidos y disfrazada con el abrigo de toda clase de pieles.
Logró escapar, y puso rumbo al horizonte. Durante su viaje ella no miró atrás, porque sólo tenía un objetivo: llegar al Sol.
Pasaban los días y ella andaba y andaba, pero no surtía efecto, el Sol siempre estaba igual de lejos. Se fue poco a poco agotando hasta que se desmayó. Cuando se creía muerta, un grupo de cazadores la recogió que en un principio la había confundido con un animal muerto debido al abrigo. Despertó y vio que estaba en una habitación acompañada por alguien que no sabía quién era.
- ¿Hola?- dijo ella.
- Hola, soy Cuchillodepalo.
- ¿Cuchillodepalo?- preguntó Flor.
Entonces él le explicó que a él le llamaban así porque era el cocinero de palacio, y en ese reino todos tenían motes, nadie se llamaba por sus nombres, excepto al rey y al príncipe. Esto tranquilizó a Flor, ya que ése no era su reino y no se encontraría con el rapapolvo de su padre. Asustada por la posibilidad de tener que volver a vagabundear por las tierras y dando por perdido su plan de llegar al Sol, Flor le preguntó a Cuchillodepalo si podía quedarse allí. Así que él le respondio:
- Sí, pero sólo si me ayudas en la cocina para dar de comer a todo el palacio.
Ella aceptó, y se dedicó plenamente a cocinar y a ayudar a cuchillo de palo. Ya que se iba a quedar a vivir allí, la pusieron de nombre “Toda clase de pieles” por cómo la habían encontrado.
Un día, llegó a la cocina la noticia de que tendrían que cocinar para mucha más gente porque dentro de unos días se celebraría la fiesta para encontrar esposa al príncipe, y llegarían nobles de todos los reinos. Pero como en la fiesta que la preparaban a Flor, este tipo de fiestas duraban tres días para poder elegir mejor a la esposa o al esposo.
Llegó el primer día, y los dos cocineros estuvieron preparando comidas durante todo el día; pero según se acercaba la hora del baile, Todaclasedepieles sentía la necesidad de presentarse allí, así que le pidió permiso Cuchillodepalo, y él aceptó con la condición de que no se hiciera notar en la fiesta, y que volviera para hacer la sopa de la cena del príncipe. Ella corrió a su habitación a arreglarse y a ponerse su vestido tan dorado como el Sol, y se fue al baile. Nada más entrar todos la miraron por su belleza y al príncipe le llamó la atención, así que la invitó a bailar y estuvieron toda la noche bailando hasta que llegó la hora de la cena. Ella corrió a su habitación a quitarse el vestido para intentar llegar a hacer la cena; Cuchillodepalo la castigó con hacerle la cena al príncipe y llevárselo a su habitación por no haber vuelto con más tiempo de antelación. Así que ella hizo la sopa y se la llevó al príncipe a su habitación. Al dejársela en la habitación le echa en la sopa una pequeña rueca que tenía colgada en la cadena de su cuello. Además de encontrarse la rueca, al príncipe esa noche le gustó más de lo normal la sopa, así que bajó a ver al cocinero y preguntarle quién la había hecho, y Chuchillodepalo le dijo que él mismo la había hecho con sus propias manos.
Al día siguiente se repitió la misma operación, Todaclasedepieles pasa todo el día cocinando, y vuelve a pedir permiso para ir al baile, que le es concedido. Ella se pone su vestido tan plateado como la luna y se presenta en el baile llamando la atención del príncipe. Él no tenía más ojos que para ella y la invita otra vez a bailar. Pero otra vez a la hora de la cena ella huye, se quita el vestido, se recoge el pelo, y va a la cocina donde le vuelve a castigar Cuchillodepalo con hacer la sopa y llevársela a su habitación al príncipe. Al llegar a la habitación el príncipe se muestra muy amable, dándole las gracias; se toma la sopa y le vuelve a encantar, encontrándose una medallita que le había dejado Todaclasedepieles, así que baja a la cocina y le vuelve a preguntar al cocinero, y él le dice que sólo le ha ayudado su ayudante, pero que la había hecho él. A pesar de las afirmaciones del cocinero, el príncipe duda de si las palabras de Cuchillodepalo son verdad.
Llega el último día y Todaclasedepieles está deseando que llegue la hora del baile mientras se pasa todo el día cocinando. Al caer la noche le vuelve a pedir permiso al cocinero, y sale corriendo a su habitación, donde ella se viste con el último vestido que tenía, el vestido tan brillante como las estrellas.
Ella sabía que ése era el día en el que el príncipe escogería esposa, y ella tenía la ilusión de serlo. Al entrar en palacio, todas las luces se reflejaban en el vestido, haciéndola parecer una estrella, estaba espectacular. Todos los hombres no dejaban de mirarla y el príncipe tampoco, así que siguiendo el ritual de las noches anteriores la invitó a bailar. Ese día empezaron a hablar, y ella se dejó llevar por la conversación, lo que la despistó de controlar la hora. Se le hizo tarde y ese día tuvo que correr más que ninguno de los otros dos anteriores. Se recogió el pelo, se lavó la cara, y se puso encima el abrigo de toda clase de pieles. Tuvo que hacer la sopa muy rápido y al llevársela metió el último objeto que le quedaba, un anillo que había pertenecido a su madre.
Al entrar en la habitación el príncipe la estaba esperando para tomarse la sopa antes de que se fuera; al acabársela se encontró el anillo y se hizo el sorprendido, la quitó el abrigo de toda clase de pieles y la vio con el vestido más brillante que las estrellas.
Ella se sonrojó, y el se arrodilló y le puso el anillo mientras decia: “Este es el anillo con el que me gustaría desposarte, que te casaras conmigo, y que me hicieras el hombre más feliz del mundo”.
Ella fue conocida con la princesa Todaclasedepieles, fueron felices el resto de su vida y colorin colorado... este cuento se ha acabado.

REFLEXIÓN BLOQUE 2

Si algo hemos aprendido de este bloque, es que los textos folclóricos no han sido creados para los niños, aunque en la actualidad sí se utilice como tal; por lo tanto como maestros no debemos elegir cualquier texto y dárselo a los niños, sino que debemos escogerlos y analizarlos, sabiendo de sus características y las del autor, para así sacarle más jugo y trabajarlo mejor con los niños.
Si para algo nos pueden servir los textos folclóricos es para educar en valores a los niños, porque como hemos visto la mayoría de estos textos tienen un trasfondo moral, con o sin moraleja, pero que remueven los sentimientos, y en el caso de los niños mucho más, porque se pueden adaptar los cuentos para que les sean más cercanos.
Y por último, como acabo de decir, los textos folclóricos son adaptables por cualquier persona, así que nosotros como maestros, si queremos (y muchas veces debemos) podremos adaptar un texto que nos parezca adecuado para trabajar, siempre respetando las pautas de los textos folclóricos.

BLOQUE 2 - Textos folclóricos

Los textos folclóricos como dice el nombre, vienen son textos que vienen del pueblo y su cultura, basados en la transmisión oral, razón por la cual, se podría decir que casi el 100% de ellos han sido modificados.
A partir de ingresar la LOGSE en el Sistema Educativo se empezaron a incorporar los textos folclóricos en las aulas, ya que antes no se utilizaban más que textos tradicionales (que son parte de los folclóricos) y eran considerados más adecuados para Educación Infantil. Gran error puesto que no todos los textos folclóricos eran textos creados sólo para niños, sino que eran contados en familia para divertir tanto a mayores como a pequeños; por lo que sus historias tenían un trasfondo generalmente de lección cotidiana, aprendizajes para la vida de su época, aunque en casi todos los casos valen para cualquier momento histórico. Los textos folclóricos son literatura ganada, literatura que no fue creada para que sus lectores fueran niños, pero que posteriormente se ha ido destinando al sector infantil.
 La mayoría de estos textos acababan bien, porque son los sueños que tenían los autores en aquel momento, son cuentos que reflejan las aspiraciones que tenía el pueblo de convertirse en nobles, o caballeros, o héroes, o cualquier otra cosa que en aquel entonces eran impensables.
Los autores eran anónimos, porque los textos folclóricos han sido versionados y adaptados por tantas y tantas personas, que si hubiera que poner el autor no se podría nunca saber ciertamente quiénes han aportado su granito de arena a la creación del texto que existe actualmente, generalmente por la falta de documentación al respecto.
Por lo tanto, todos los textos folclóricos están hechos en un momento, por un autor anónimo, un lugar y unas costumbres.
El primer folclórico que clasificó los textos fue Vladimir Propp, que hizo la siguiente separación:
-         Mitos: historias con carácter religioso. Ejemplo: el “Génesis” con Adán y Eva.
-         Cuentos de animales: donde todos los personajes son animales.
o       Cuentos de animales propiamente dichos: los animales representan a personas. Ejemplo: “Los siete cabritillos”
o       Fábulas: los animales representan características y/o valores de las personas. Ejemplo: “La cigarra y la hormiga”
-         Cuentos de fórmula: para que un cuento sea así tienes que aprendértelo de principio a final, porque si no se perdería la melodía y la rima. Como ejemplo nos valdría algún cuento mínimo.
-         Cuentos de hadas o maravillosos: parte de estos cuentos son los que tengan personajes fantásticos, o en los que las personas y los animales interactúen hablando entre sí.

Otra clasificación es la que hizo Gianni Rodari:
-         Cuentos de animales: donde entran los cuentos de animales salvajes, los cuentos de animales domésticos, los de relaciones entre hombre y animal, y los que tienen relaciones entre animales salvajes y domésticos.
-         Cuentos mágicos: son los cuentos de hadas de Propp, divididos en: historias de adversarios sobrenaturales; historias de parientes sobrenaturales o embrujados; empresas sobrehumanas; auxiliares sobrenaturales; objetos mágicos; historias de carácter religioso; y los cuentos de bodas.
-         Cuentos de bromas y anécdotas: son cuentos con carácter humorístico, donde se encuentran los cuentos del tonto, los cuentos del listo, y los cuentos con fórmula o estribillo.

O la que hizo Sara C. Bryant que los clasificó según la edad del lector:
-         Cuentos de 3 a 5: historias rimadas, historias con fragmentos versificados, historias con animales personificados, cuentos burlescos, cuentos de hadas.
-         Cuentos de 5 a 7 años: leyendas locales, cuentos de hadas y cuentos burlescos, fábulas, leyendas, narraciones de historia natural.
-         Cuentos para mayores: leyendas locales, fábulas, mitos y alegorías, parábolas de la naturaleza, narraciones históricas, historias reales, narraciones humorísticas.

En cualquier caso todos hablan de textos folclóricos, textos que han sido modificados por los relatadores de los mismo. Estas modificaciones consistían en:
-         Versiones: modificaciones al gusto del autor sin importar nada más.
-         Adaptaciones: modificaciones dirigidas hacia un público en concreto. El autor puede hacer diferentes tipos de adaptaciones de otros cuentos según la edad, el sexo, la cultura, la sociedad o clase social al que va dirigido, etc.
Para ello puede:
o       hacer adaptaciones de las palabras a un lenguaje más actual.
o       modificaciones de alguna/s palabras sueltas caídas en desuso.
o       Cambiar el contenido:
§       porque no es adecuado para la edad del lector.
§       se puede recortar o suprimir algún trozo del texto porque pueda ser largo para la edad de los lectores, o solamente porque el autor no considere oportuno dejarlo.
§       para hacer exageraciones y remarcar algunos detalles de estilo dramático, humorístico, etc.
§       para usar los textos folclóricos en otro tipo de eventos que no sean la lectura, como teatro, cine, cuentacuentos, etc.
Esos son las características que se puede cambiar, pero en un texto folclórico no se puede tocar: la maduración de protagonista (acompañado de pruebas para conseguirla); para que se de esa maduración, el protagonista tiene que salir del núcleo familiar; el motivo por el cual se ha creado el texto, ya sea la bella frente a la bestia, el hijo pequeño que triunfa, el débil, el desvalido...
Los textos folclóricos eran textos de transmisión oral, lo que perjudicaba a la identificación del autor, pero ya en el siglo XVIII y XIX se empiezan a recopilar los textos conocidos hasta ese momento, lo que provoca un boom en el conocimiento de este tipo de literatura, y le da fama tanto a autores como a recopiladores, y a nosotros como maestros es lo que nos interesa ya que nos servirán para poder escoger textos folclóricos en un futuro:
-         Hans Christian Andersen, que se dedicó a escribir a partir de la realidad de la Dinamarca del siglo XIX, y a partir de ella hacia fantasías o no, pero siempre basado en la realidad o por lo menos sus textos folclóricos así lo reflejan. Su finalidad era crear historias con final artístico tomando características de la realidad. Desde el punto de vista del maestro, hay que decir que Andersen no creaba estos textos para el público infantil. Entre sus obras más famosas está “La Sirenita”.
-         Charles Perrault, autor que adaptaba obras para convertirlas en paraliteratura, ya que en el fondo el objetivo era con efectos moralizadores, por lo que nos puede servir para niños.
-         Los hermanos Grimm, éstos se encargaban de recopilar folclore ya existente para hacer recopilaciones, pero al igual que Perrault, la función era moral.
-         El caso de Hoffman es distinto, en su caso, al igual que Andersen creaba cuentos folclóricos, pero los reunía en recopilatorios.

Pero, ¿y en los casos nacionales, quienes se han dedicado a recopilar textos folclóricos?
Tenemos el caso de Saturnino Calleja, que como ya vimos, se encargaba de recopilar y expandir la literatura en libros de todo tipo y para todo tipo de público.
Otro adaptador es el padre Coloma, que también hacía adaptaciones pero todo con un carácter religioso/moralizador. Sus textos son del género infantil pero no artísticamente, sino que era paraliteratura creada para los niños.
El caso más especial es el de Cecilia Bolh de Faber, que utilizó un pseudónimo, adoptando un nombre masculino (Fernán Caballero) para poder alcanzar la fama, ya que en su época las mujeres no lo tenían nada fácil.


WEBGRAFIA:

BLOQUE 1 - Análisis del libro


Ficha bibliográfica:
-         Título: El niño que quería ser Tintín
-         Autor: Santiago García-Clariac
-         Editorial: SM – El barco de vapor
-         Año de la primera edición: 1997
-         Edición: febrero de 2010
-         Ilustraciones: Francesc Infante
-         Receptor: a partir de 9 años (4º de Primaria aproximadamente)

Síntesis:
El libro trata sobre un niño llamado David al que le gusta mucho Tintín y basa su vida alrededor de las aventuras del personaje de ficción.
David no entiende muy bien a las personas que le rodean, están las discusiones de sus padres, los abusos de sus amigos de clase, y la indiferencia de la chica que le gusta, mientras a él le acusan de infantil o de vivir en su mundo de ficción por culpa de los tebeos de Tintín. Al final David acaba haciendo frente a todos sus problemas, como haría su héroe, y se da cuenta que es el mejor camino para resolverlos.

Análisis:
Para analizar el libro lo dividiremos en: formato, tema y personajes.
1)      Formato: para empezar hay que hablar de la portada, ya que es el elemento que salta primero a la vista del lector, y podemos decir que la portada es simple pero para mi gusto no esta nada mal, ya que llama la atención la sola presencia de un niño que tiene parecido con otro personaje más famoso como es Tintín, en conjunto con los colores presentados que son llamativos (como el naranja o el amarillo). En cuanto a la contraportada no hay nada que destaque, aunque está bien escogido, porque hay un párrafo del libro en el que David (el protagonista) se hace preguntas de un niño de su edad sobre la vida, lo que llamará la atención a los niños.
Pasamos al interior del libro, donde hablaré de la letra, el papel, etc). La letra en cuanto a tamaño está bien, ya que es un poco más grande de lo normal, pero sin llegar a ser enorme. Creo que esta bien porque pienso que con aproximadamente 9 años hay que empezar a acostumbrar al niño a que lea la letra que se encuentra en cualquier revista, periódico, o simplemente en otros libros.
Además el tamaño del papel es de bolsillo, que para un niño es lo apropiado, ya que si parece muy grande puede pensar que es largo.
Y lo último del formato son las ilustraciones, que aparecen cada capítulo siguiendo el argumento, y son tipo comic, que vienen muy bien hiladas ya que el protagonista idolatra a Tintín.
Por lo que podemos decir que el formato del libro es adecuado para la edad a la que se recomienda este libro.
2)      Tema: como he dicho, la historia trata en una ciudad (no se especifica el nombre), con niños normales, que van a un colegio normal; es decir, es un tema que les puede ser muy familiar, ya que pueden comparar su vida con la del niño protagonista o cualquier otro del libro. Además en la historia hay elementos también muy familiares para un niño de 9 años, como una tienda de chucherías, deberes del colegio, o las broncas del profesor.
Además paralelamente el libro está fomentando que los niños investiguen quién es Tintín, y por qué no que puedan empezar a leerlo.
El tema del libro creo que es apropiado porque les será entretenido ya que no tendrán que pensar excesivamente y pensarán en cómo es su vida a la vez que se entretienen con la del libro. Además el lenguaje empleado para describir las situaciones son como las que usaría alguien de su edad, son frases simples y con palabras que no son cultas.
3)      Personajes: los personajes son fundamentalmente un grupo de amigos de 8 años, que se conocen por el colegio. Está el “abusón”, los seguidores del abusón, las chicas, y el protagonista que es el incomprendido por leer a Tintín. Y este tipo de niños se encuentra en cualquier grupo social de una clase, lo que facilita la identificación del lector con cualquier personaje.

REFLEXIÓN BLOQUE 1

Este tema como futuro maestro, posiblemente sea de los más ricos en contenido a la hora de ponerlo en práctica, ya que son recursos en los que podemos apoyarnos siempre que necesitemos algún texto para algún ejercicio programado.
Este bloque nos sirve como herramienta para saber cómo debemos analizar un libro y aceptarlo en el aprendizaje de nuestros alumnos, siguiendo sus gustos y teniendo nuestros propios conocimientos sobre los libros que hay en el mercado.
Pero el bloque como tal no nos sirve como conocimiento total, esto es sólo una base sobre lo que nosotros debemos trabajar como profesores, estando al corriente de la actualidad literaria, y sobre la que debemos investigar, con la ayuda de revistas, paginas web, o con otro tipo de medios.

BLOQUE 1 - Literatura infantil

La literatura infantil es aquella literatura que está dirigida al público infantil, y es considerada un arte que abarca campos de qué hacer humano básicos y que tiene que ver de manera raigal con la cultura, la educación, la comunicación, la ciencia y lo más central de las humanidades. Se puede decir que la literatura infantil se encarga interdisciplinarmente de todos los campos a potenciar en una persona que esta en proceso de maduración, como son los niños.
Como encontré en la página web “http://aal.idoneos.com/index.php/Revista/A%C3%B1o_8_Nro._7/Literatura_infantil” los cuentos infantiles tienen las siguientes funciones:
-         función estética
-         función ética
-         función social
-         función didáctica
-         función lúdica
Que como ya he dicho, son en su amplia mayoría las necesidades que tienen los niños para desarrollarse como personas para el futuro, además acompañadas por una función lúdica y otra estética indispensable para favorecer cualquier acción con el mundo infantil. Como dice Juan Cervera, en la literatura infantil “se integran todas las manifestaciones y actividades que tienen como base la palabra con finalidad artística o lúdica que interesan al niño”.
Pero la literatura infantil no siempre ha existido, hasta finales del siglo XIX no había literatura para niños como tal, sino que se creaba simplemente literatura, no era específicamente para un público en concreto.
Anteriormente al siglo XIX podía  existir algún libro infantil, pero tenía más carácter didáctico que literario. Fue a partir de dos autores europeos cuando se empezó a escribir cuentos para un público en concreto. Estos dos autores fueron Alejandro Dumas y Julio Verne, aunque sus obras fueron para el sector juvenil, pero ya era un paso hacia el infantil. Este hecho se prolongó durante un siglo más, por lo que podemos decir que entre los siglos XIX y XX estos cuentos se consideraban infantiles aunque en la actualidad no lo serían, es decir, cubrían la necesidad de aquella época, pero actualmente no se considerarían infantiles.
En España, apareció Saturnino Calleja a finales del siglo XIX, que fue un editor y escritor español que se dedicó a vender libros para niños, tanto literarios como didácticos. Calleja editó recopilaciones con cuentos folclóricos a precios bajos, lo que hizo que la población pudiera culturizarse literariamente. En los cuentos de Calleja aparecen personajes planos (con dos o tres características) y en los que hay personajes buenos y malos reflejados como angeles y demonios, o con hitos católicos; eran cuentos folclóricos muy simples.
Saturnino Calleja también editó libros más elaborados con buenas ilustraciones pero más caros que los primeros, eran solo aptos para bolsillos llenos de dinero. Aunque fue con las recopilaciones baratas con las que se hizo famoso y se ganó un nombre en la historia.
Ya avanzado el siglo XX la literatura infantil era una realidad al alza, y surgieron muchos escritores como Roald Dahl, Michael Ende, Gianni Rodari, etc. A algunos los podemos encontrar en los premios más famosos, como los premio Hans Christian Andersen (internacionales), o como los premios Lazarillo, que son españoles.
En todo este tipo de premios ya sean de organizaciones o de las propias editoriales, podemos encontrar a algunos de los autores más importantes de la actualidad principalmente (porque los premios son actuales).
Pero ¿qué tipo de literatura escriben estos autores? ¿Cómo podemos dividir la literatura infantil? ¿Qué clase de libros nos podemos encontrar?
He buscado en varias páginas tanto de editoriales como en la página de S.O.L. (Servicio de Orientación de Lectura) y en otras, como blogs u otros sitios web, y he llegado a la conclusión de que los géneros literarios infantiles podrían ser:
-         Narrativa
-         Aventuras
-         Terror
-         Fantasía
-         Humor
-         Ciencia-ficción
-         Policiaco
-         Poesía
-         Teatro
-         Historia
Los escritores escriben estos géneros, pero no a todos los niños tienen que gustarle todos, así inspeccioné sobre los gustos del mundo infantil. Aunque lo más sencillo y lo más fiable es preguntar a los niños sus gustos sobre las lecturas, busqué documentos en varios sitios como: SOL, páginas de colegios y páginas de la Junta de Andalucía. Pero después de comprobar el contenido, me he decantado más por la división de SOL ya que especifica más el tipo de género que las otras, que se quedan en las características, de donde puedes sacar también el gusto de los niños.
La división por edades en Educación Primaria sería la siguiente:
- De 6 a 8 años
Durante esta época los niños prefieren historias no reales, fantasiosas, en lugares lejanos en donde los personajes sean animales, maquinas y otros seres, pero que no sean personas, aunque tienen que tener características y rasgos como tal.
Las historias deben ser entretenidas, en un ambiente familiar y relajado, reflejadas con un lenguaje y un argumento claro y simple, rebosante de diálogos. El argumento no puede ser largo para que los lectores no se desconcentren, por lo que los cuentos deben ser dinámicos y acompañados a poder ser de ilustraciones en color que faciliten el entendimiento de la historia.
- De 9 a 11 años
Al mejorar la competencia lectora, le interesan los personajes con problemas como los suyos y las aventuras de pandillas, en las que se proyecta. Aunque también busca misterio, cuentos fantásticos y clásicos, biografías, deportes y juegos, pueblos lejanos, humor, animales reales o fantásticos, inventos, ciencia y experimentos para niños.
Hay que evitar moralejas. Acción, ambiente y caracteres vigorosos y dinámicos. No deben dejar en el niño dudas irresolubles. Frases no demasiado largas ni complejas. Tipografía de tamaño intermedio. Ilustraciones acordes al contenido del libro. Resumen del contenido en la contracubierta.

Una vez que sabemos los gustos de los niños según la edad, aunque siempre si podemos preguntárselo mejor, como futuros maestros tenemos que saber elegir los libros adecuados para nuestros niños; así que si tenemos que escoger, tendremos que saber analizar los que hay en el mercado, y posteriormente quedarnos con uno.
Para el análisis de un libro de lectura hay que tener en cuenta las siguientes características teniendo en cuenta siempre el momento evolutivo de los niños:
-         Formato: cómo es el tamaño del libro, la calidad del papel, el tamaño de la letra, tapa dura o blanda, portada, etc)
-         Tema: teniendo en cuenta los gustos de los niños y sus momentos evolutivos, si el tema del que trata el libro les resultará interesante.
-         Personajes: si existen personajes con los que se puedan sentir identificados, pero esto depende también del momento evolutivo del niño.
Si tuviera que quedarme con alguna de las características como la más importante, sería el tema, ya que del tema dependen los personajes, y aunque el formato sea malo, si el argumento les engancha nos se van a fijar en los demás posiblemente. El formato es importante en una primera impresión pero no creo que sea excesivamente relevante.
Para acabar, solo tengo que decir que si se quiere estar actualizado sobre las novedades en cuanto a libros y otros temas de literatura existen revistas, tanto para padres como para profesores, alguna de ellas son en formato digital y otras en papel.
Alguna de las revistas en formato digital que podemos encontrar en internet, y algunas en papel, son:
-         “Cuatro gatos”
-         “Imaginaria”
-         Revista Babar
-         Clij (Cuadernos de Literatura Infantil y Juvenil)


BIBLIOGRAFÍA:
-         http://sol-e.com/
-         http://www.cuatrogatos.org/
-         http://revistababar.com/wp/
-         http://www.revistaclij.com/